viernes, 16 de octubre de 2009

Estres y emociones.

Una definicion de estres bien puede ser
"Estado de animo interno ante demandas ambientales que superan la capacidad de hacerles frente".

Ha sido conceptualizado de tres maneras:
1) Centrándose en el ambiente:
Describiendo las diferencias entre los estímulos según su duración.

Estresantes agudos: su duración es limitada en el tiempo. Ej.: esperar una intervención quirúrgica.
Secuencias estresantes: serie de acontecimientos resultado de un desencadenante .Ej pérdida del trabajo.
Estresantes crónicos intermitentes: Visitas periódicas de familiares lejanos conflictivos, problemas sexuales.
Estresantes crónicos continuos: incapacidades permanentes, riñas entre padres convivientes.

2) Centrándose en las reacciones de la persona
El estrés como estado de tensión producto de una circunstancia, cuyas reacciones conllevan componentes
Psicológicos: inquietud producto de conductas, patrones de pensamiento, o emociones.
Fisiológicos: elevación del arousal (activación), incremento del gasto cardíaco (vol/tiempo),+TA

Tensión = respuesta fisiológica + respuesta psicológica

3) Interacción entre el ambiente y la persona.
Procesos de ajuste continuo mediante transacciones, afectando se recíprocamente cada uno de los dos polos (persona y ambiente). El estrés no es ni un estímulo ni una respuesta, implica un sujeto activo que modifica el impacto del estresor mediante estrategias cognitivas, emocionales, o conductuales.

Estrés: condición resultado de transacción entre persona y medio,
En que se percibe una discrepancia (real o imaginada)
Entre demandas de la situación y los recursos de los que se dispone.

Estrés: Relación particular entre el individuo y el entorno,
El cual es evaluado como amenazante o desbordante para sus recursos,
poniendo en peligro su bienestar.

Entonces
El estrés afecta todos los recursos de la persona, los cuales son limitados.
Las demandas de la situación son la cantidad de recursos que el estresor demanda.
Conlleva una discrepancia entre las demandas de la situación y los recursos personales.
La discrepancia puede ser real o percibida.
Las evaluaciones de las discrepancias demandas-recursos están situadas en interacciones con el medio ambiente.
Las interacciones son afectadas por los factores tanto personales como ambientales.

Estresor potencial:
Genera una Primera Evaluación en función de sus consecuencias, pudiendo ser
Neutro: prácticamente irrelevante
Positivo: las consecuencias se valoran como benignas, aun con cierta tensión.
negativo: implican daño (acontecido) amenaza (posibilidad) desafío.

Frente a una evaluación negativa, se produce una nueva evaluación, Evaluación Secundaria, que determina que puede hacerse , cómo puede afrontarse.
De esta última se produciría un mayor o menor estrés.


Llamamos entonces afrontamiento
A los esfuerzos conductuales y cognitivos para dirigir o controlar las demandas ambientales o internas y los conflictos que exceden los recursos disponibles.
Este afrontamiento puede ejercerse tanto
Modificando las condiciones que originan los problemas, como
Controlando el significado personal de la experiencia.

Respuestas al estrés.
Fisológicas, cognitivas, conductuales.
Fisiológicas: elevación del arousal (activación)
Cognitivas: valoración primaria y secundaria, arrojando tres diferentes tipos característicos: Autoreferentes, Autoeficacez, Negadores
Motoras: estilo de vida: determina la probabilidad de aparición del tipo de demandas del medio, siendo las respuestas básicas ataque, fuga, y pasividad.
Estrés y Emociones


Situaciones Bélicas:

Se investiga el Estrés como resultado de situaciones
externas traumáticas

Concepto tomado de la Ingeniería de estructuras :

Carga: fuerzas externas
Estrés: area de la estructura sobre la que se aplica la carga
Tensión: deformacion de la estructura producto de la convergencia de carga y estrés

Readaptación del Concepto


—Carga: se entiende como el estímulo estresor externo, la fuerza externa ejercida sobre la persona.
—Tensión: es análoga a la reacción de respuesta al estrés; deformación orgánica producida por el estresor


Guerra Fría: generalización del concepto a otras situaciones sociales

El concepto se generaliza, identificando tanto
causas como consecuencias emocionales en el manejo de presiones
de la vida cotidiana.


Clasificación de Selye (1974)

—Distres: dolor, angustia, perjudicial para la salud.
—Eustres: emociones dirigidas a empatía y adaptación social.

Tipos de estrés psicológicoClasificación de R. Lazarus (1966)


—*Pérdida: ya producida
—*Amenaza: probable en futuro
—*Desafío: actitud de afrontamiento positiva.
—Cada forma produce resultados psicofisiológicos y conductuales diferentes.


Teoría de la Valoración:

Enfoque subjetivista:
El estrés y la emoción dependen de la modalidad en que la persona evalúa sus transacciones con el entorno.
Originariamente este enfoque no incluía plenamente a las emociones.

Interdependencia Estrés y Emoción


El estrés implica una emocionalidad
Y también
La emocionalidad puede implicar algún estrés.


Emociones:

Cada emoción tiene una
historia de formación
diferente en relación a las interacciones con el entorno.

R. Lazarus:Las diferentes emociones se vinculan con diferentes modos de valorar lo sucedido en la adaptación

IRA ENVIDIA CELOS ANSIEDAD TEMOR CULPA VERGUENZA
ALIVIO ESPERANZA TRISTEZA FELICIDAD ORGULLO AMOR
GRATITUD COMPASION



Emociones, persona, contexto

—La ira: en relación al desprecio o degradación.
—La culpa: fallas morales
—La esperanza: promesas en un escenario no certero pero probable.
—La felicidad: en relación a progresos en la consecución de metas o logros. —La compasión: empatía por el dolor ajeno


La reiteración de similares respuestas emocionales indica la estabilidad de las pautas en la relación entre la persona y el medio.
Puede afirmarse que la respuesta emocional trasciende entonces en alguna medida al contexto situacional .
En estos casos hablamos de un rasgo de personalidad.

Unidad estrés, emoción, manejo

El significado atribuido a la situación
conlleva una evaluación de qué puede hacerse
lo que implica aspectos emocionales.
Por lo tanto no es certero afirmar que el manejo del estrés sólo es posible una vez activada la emoción

Estos tres conceptos constituyen entonces una unidad conceptual,
Donde la emoción es el concepto
que sobredetermina tanto
al estrés como a su manejo.


Síndrome de Adaptación General

Primer Estadío (Reacción de alarma) fisiológica o psicológica:
si el estrés persiste, comienza el
Segundo Estadío (Resistencia): el organismo consume recursos, en vez de elaborarlos, para reestablecer el equilibrio. De no lograrse,
Tercer Estadío ( Agotamiento): los recursos orgánicos comienzan a no responder.

Enfoques del Estrés


Desde los Estímulos:
p.e Escala de Valoración de Reajuste Social (Holmes)
*Desde las Respuestas:
diferencias individuales, vulnerabilidades.
*Desde la Relación Demandas ambientales – Recursos personales.

Autor:
Guillermo Francisco del Valle



Que es una fobia social - trastorno de ansiedad social

¿Qué es una fobia social?

Una fobia social es un tipo especial de miedo. Todos tenemos miedos a cosas como las serpientes venenosas, los perros rabiosos, las infecciones, los accidentes, aunque este miedo se traduce en un comportamiento de simple cautela frente a las situaciones de peligro y además el miedo AYUDA a estar alerta en la vida cotidiana en vez de INTERFERIR en ella de forma limitante y negativa.
Hablamos de fobias cuando la intensidad con la que experimentamos el miedo frente a los distintos peligros es:
  • injustificado por la objetividad del peligro
  • inoportuno (no lo sentimos en el momento apropiado)
  • desmesurado (sentimos más de lo que deberíamos)
  • interfiere nuestra vida normal de forma innecesaria, y nos reduce nuestra capacidad de acción y goce.
Aunque algunas fobias son muy conocidas, como el miedo irracional a coger el ascensor, nadar, las ratas y cucarachas, por ejemplo, en cambio en la fobia social el miedo se centra en SITUACIONES más complejas y sorprendentes, y además altera totalmente nuestra vida ya que nos vemos obligados a vivir en sociedad (a diferencia del miedo a las serpientes que puede ser inocuo si no nos toca trabajar en un zoo)
Todos solemos experimentar incertidumbre, ansiedad e inseguridad al conocer a personas nuevas, pero una vez roto el hielo, la mayoría logra convertir esos encuentros en una experiencia agradable.
En cambio las personas con fobia social experimentan un grado de ansiedad mucho más elevado en estas situaciones.
Puede ser tanto el grado de ansiedad o vergüenza que se produzcan señales físicas delatadoras (sudor, temblor muscular y de voz, rubor, etc.) que nos hacen más vulnerables e inseguros y la situación social, en vez de convertirse en un tiempo aceptable en algo agradable se transforma en algo cada vez más desagradable, con lo que nos desanima a pasar esos malos tragos y utilizar subterfugios de evitación y control de estas penosas situaciones.
El deseo que solemos tener todos de formar parte de los grupos sociales, ser valorados y apreciados se ve gravemente disminuido, con la consiguiente baja autoestima y complejo de inferioridad.
Elementos más importantes de la fobia social:
  • Preocupación por llegar a ser el centro de atención cada vez que nos encontramos con alguien.
  • Temor a propósito de que alguien nos mire y observe lo que estamos haciendo.
  • Temor a que nos presenten.
  • Temor a propósito de comer o beber en público
  • Dificultad para manejarse en comercios y relaciones administrativas
  • Terror a dirigirse a un público o grupo de amigos
  • Aversión a realizar llamadas telefónicas y realizar gestiones
  • Dificultad para confrontarse en el trabajo o hacer reclamaciones (incluso si se tiene la razón y el derecho de hacerlo)
  • Las fiestas y reuniones son una pesadilla y el comportamiento de la persona que tiene fobia social consiste en ponerse cerca de la puerta o encargarse de discretas tareas que le permitan huir de la situación.
  • Tendencia a rehuir espacios cerrados donde hay gente
  • Sensación de que todos nos miran y nos desvalorizan
  • Temor a que nuestras intervenciones parezcan ridículas, pobres o inadecuadas. Miedo a 'quedarnos en blanco'.
Algunas personas con fobia social tienden a beber alcohol para ganar así valor y desinhibición.
La fobia social puede ser algo que -a diferencia de la fobia a las serpientes- se nos haga presente cada vez que nos vemos obligados a ser el centro de atención, o si nuestra profesión implica estar expuestos a personas desconocidas con frecuencia (vendedores, actores, músicos, maestros, etc.)
También nos podemos ver obligados a hablar en público (en la escuela, reuniones de trabajo, amigos -cuando son un grupo grande-).
Algunas fobias sociales acentúan el miedo a tratar con el otro sexo a extremos que producen graves dificultades para conseguir pareja.
El miedo no es un estado emocional inmóvil, como un estado de tristeza o alegría. Se alimenta de:
  • Los estímulos temidos (estar en algún tipo de situación social que nos produce miedo)
  • La anticipación (imaginar las situaciones que podrían suceder y sentir el miedo 'como si' estuvieran sucediendo los acontecimientos temidos)
  • los mecanismos de evitación (aunque sea una paradoja el ALIVIO de subir por las escaleras AUMENTA el miedo a coger el ascensor de una persona con fobia al ascensor). Por lo tanto las conductas de 'precaución' como ponerse en un rincón, hablar poco, cruzar la acera, etc. hacen que sintamos MAS miedo la próxima vez.
  • Los pensamientos auto-críticos (del estilo "pareceré tonto/a", "debería hablar pero no se me ocurre nada". "estoy haciendo el ridículo", "parezco torpe", "me consideran inferior", etc.).
  • La falta de practica en expresión verbal (igual que la falta de ejercicio nos entumece) el expresarse DEMASIADO POCO, dificulta la facilidad y creatividad de comunicación.
  • El circulo vicioso que producen las experiencias negativas: como lo hemos pasado mal una vez tememos que la siguiente será igual o peor, con lo esta creencia hace de profecía que se auto-cumple y nos induce a estar más amedrentados e ansiosos la próxima vez, con lo que de nuevo alimentamos el temor para la siguiente ocasión.
  • La costumbre de 'repasar' y 'rumiar' lo sucedido: el no haber sido capaces de actuar con la soltura de los demás (el fóbico puede fijarse en la persona más popular y maravillosa para compararse con ella) nos genera desasosiego y ácida incomodidad personal, recordando cada uno de los pequeños detalles de impotencia y comportamiento penoso con la precisión de un latigazo, y de pronto aparecen iluminadas como por un foco las palabras y las cosas que DEBERÍAMOS haber dicho o hecho.
  • La propaganda negativa que hacemos sobre la imagen de nuestro Yo. A base de vernos torpes, inseguros, empobrecidos, poco interesantes, etc. un numero elevado de veces, entramos en la 'secta' de los 'no valgo nada', con lo que ya ni nos atrevemos a aspirar a las cosas sanas y bonitas que los demás nos parece que sí tienen derecho a tener (amor, admiración, amistad). Esto puede influir poderosamente en nuestras decisiones (aspiraciones laborales, proyectos, el tipo de pareja que nos parece adecuada, los derechos que creemos que nos merecemos, etc.) .
  • La angustia como aparición 'maldita' e 'intrusa'. Nos angustiamos por la posibilidad de sentir angustia y al percibir que nos estamos angustiando sólo por pensarlo sentimos que es una angustia incontrolable. La angustia se convierte por sí misma en el peor enemigo -más allá incluso de las situaciones que empezaron a provocar. Tenemos miedo de tener miedo, y que además ese miedo sea visible y nos delate como miedosos dignos de desprecio.

Síntomas físicos

Los síntomas de la ansiedad que aparecen en la persona que tiene fobia social cuando se expone a lo temido pueden llegar a ser el símbolo de 'lo peor' que le sucede:
  • Sequedad de boca (junto a la idea de que uno se 'atrabancará', tartamudeará, toserá, no podrá hablar, etc.)
  • Palpitaciones (el corazón parece correr demasiado deprisa o irregularmente y eso producir desmayos, ataques cardíacos, mareos, o algún tipo de colapso)
  • Temblores de manos, pies o voz que pueden ser rápidamente observados y delatarnos como 'inferiores' o 'penosos' o 'impresentables'.
  • Sudor (en las manos que luego puede que tengamos que presentar en un saludo; sudor corporal que traspasa la ropa y nos avergüenza haciendo nos aparecer como 'indeseables' o 'repugnantes')
  • Rubor (angustia + sentimientos intensos de vergüenza)
  • Falta de concentración (que nos haga olvidar datos que queríamos decir o desorganice el curso del pensamiento de modo que no sepamos de donde veníamos o a donde queríamos llegar)

¿Y la timidez?

La timidez es una forma atenuada de fobia social, y que habitualmente tenemos y disimulamos todos mejor o peor.
No sabemos si resultaremos competentes, valiosos o apreciables a los demás.
Muchas veces esto esta en agudo contraste con un ambiente familiar en el que hemos sido mimados y protegidos, aunque en otras ocasiones es todo lo contrario: un ambiente familiar autoritario y descalificador también produce futuros tímidos.
Nuestra forma de ser se hace en el ejercicio de relacionarse con los demás, es un resultado de ATREVERSE a ser delante de los demás, mezclándose y entrando en conflictos que uno aprende a ir solucionando sobre la marcha.
La persona tímida es cautelosa: no se arriesga a equivocarse, a ser rechazada o a resultar inadecuada, y como no practica no avanza, y espera que un día se levantará con la moral alta y resultará segura de sí misma por arte de gracia (y no pasando por los malos tragos y apuros que todos tenemos que traspasar para curarnos de complejos e inseguridades y para resultar hábiles amigos y relacione públicas).
Descubrir lo que somos realmente tiene algo de lanzarse al abismo de lo desconocido y explorar lo que resulta de ello, y esta es la forma mejor de superar la timidez.
Palabra a palabra obligarnos a nosotros mismos a enseñar LO QUE PENSAMOS pero también -y sobre todo- LO QUE SENTIMOS (como cuando decimos 'me moleta el humo que me hechas a la cara' o 'me gustaría que tomáramos el sábado un café juntos', o 'este fin de semana me apetece ir de excursión con unos amigos que hace tiempo que no veo').
A menudo superar la timidez es una cuestión de número de palabras (cambiar el 'si', 'no', 'tal vez' por frases de cinco minutos).
Dejarse ir hacia una frase que va a ser muy larga es como confiar en tu propio cerebro, en su auto-estimularse, refrescarse y entusiasmarse por una tarea intelectual (en el fondo le encanta, es lo suyo).
La persona tímida tiende a creer que no tiene mucho VALOR, o CAPACIDAD, pero la realidad no es exactamente esa (mucho grandes tímidos han sido perfectamente grande genios científicos o escritores) sino que UNO MISMO/A SE PONE ENCIMA UN PEDRUSCO, inhibiéndose con pensamientos de mal agüero tales como 'lo mio no tiene importancia' 'mis cosas aburren' 'mi interés no coincide con el de los demás' 'podría ofender, aburrir o molestar a alguien' o lindezas parecidas.
Este AUTO-SABOTAJE equivale a que estuviéramos pensando 'seguramente no caminaré recto y estéticamente, pareceré torpe y tropezaré' y como fruto de esta hipótesis tan poco constructiva REALMENTE hasta consiguiéramos andar mal y tropezar.
Nos cuesta encontrar un lugar en el mundo, EL NUESTRO, y en vez de ello caemos en el error de pretender ser OTROS.
Sería buena cosa rebelarnos de una vez por todas y determinarnos a ser espontáneos, aceptando luego con resignación el número amigos y enemigos que ello produzca (por lo menos seríamos felices NOSOTROS y NUESTROS amigos, y nuestra alegría decoraría como un adorno navideño el paisaje de los demás).

¿Un ataque de pánico de regalo?

El nivel de ansiedad puede subir a un punto crítico por encima del cual se produce un 'ataque de pánico' durante unos minutos en los que la persona le parece que pierde el mundo de vista, el equilibrio, o que pudiera enloquecer o estar muriendo de forma repentina.
Los mismos pensamientos de estar 'pillado' 'atrapado' y padeciendo algo 'horrible' actúa de incentivador y mantenedor del ataque. Las complicaciones de los ataques de pánico pueden ser que la persona desarrolle 'agorafobia' o miedo a tener ataques de pánico en situaciones donde ya se han producido o que parezcan una 'encerrona' (un espacio demasiado cerrado, demasiado abierto, demasiados estímulos o gente, estamos lejos o en una situación en la que haríamos un mal papel huyendo).
Algunas personas caen en el alcoholismo o en el consumo de hachis o cocaína o abusando de los tranquilizantes recetados por el médico como una forma de 'capear' estas dificultades sin resolverlas del modo adecuado.

¿Cómo afecta nuestras vidas la fobia social?

Nos empobrece reduciendo a la mitad nuestra vida social, nuestras posibilidades de ocio y progreso profesional.
La frustración que todo ello implica puede reflejarse indirectamente en forma de desánimo general (a veces es causa de caer en un depresión tras un larga etapa vital de sufrimiento) e irritación descontrolada con el circulo familiar íntimo.
Las relaciones que exigen iniciativa, sostén y aportación por nuestra parte se pueden llegar a ver gravemente resentidas y romperse.
Elimina aquellos oportunidades que suelen provenir de la actividad social (hacer amigos en el colegio o en el trabajo, participar en las equipos, promocionarse en el trabajo, etc.) . Puede ocurrirle a un fóbico social que rechace un buen trabajo solamente por el miedo que tiene a las nuevas responsabilidades, especialmente si tiene que tratar con muchas personas y hacer reuniones.

¿Soy un bicho raro?

De 1-2 por mil de los hombre y 2-3 por mil de las mujeres padecen fobia social. Es una dificultad que se conoce bien, tanto el porqué se produce como el modo en el que puede tratarse.

¿Tiene solución?

No es imposible adquirir estas dos capacidad que resolverían el problema:
  1. las habilidades expresivas, sociales y de trato que no hayamos podido adquirir en el curso de nuestro aprendizaje por razones de modelos familiares imperfectos, inadecuada intervención escolar o por las dificultades emocionales que hayan interferido.
  2. La habilidad de controlar el miedo irracional mediante distintas estrategias de enfrentamiento, control emocional e información psicoterapéutica especializada.
Una ayuda farmacológica puede ser aceptable como un medio de atemperar las dificultades iniciales, especialmente si el nivel de ansiedad produce severos síntomas incapacitantes como intensas taquicardias o ataques de pánico, insomnio y depresión.

¿Puedo solucionarlo por mí mismo/a?

  • Algunas lecturas de libros de autoayuda que tratan las fobias de una forma sencilla nos pertrecharán con una mayor comprensión del problema.
  • La práctica de la relajación, yoga, y/o ejercicio para bajar el nivel general de ansiedad.
  • Ejercicios prácticos de expresión:
    • lectura en voz alta del periódico utilizando un tono de voz alto y que tenga contenido emocional;
    • grabar un pequeño ejercicio de unos 10 minutos (5 veces a la semana) en el que contemos como si estuviéramos delante de un grupo de personas un asunto que hemos leído, visto en televisión, escuchado en la radio o hemos oído o pensado. El tema ha de ser diferente cada vez. Contra más exagerado es el tono expresando disgusto, placer, admiración, guasa, etc. más efectivo es el ejercicio. No olvidar al final añadir nuestra opinión sobre el asunto. Procurar conforme pasa el tiempo aumentar la longitud de las frases.
  • Preparar el terreno hablando en primer lugar en las situaciones mas fáciles (familiares de confianza, vecinos, compañeros de trabajo) introduciendo elementos que impliquen humor, comentarios personales y opiniones atrevidas.
  • Procurar adquirir compromisos tales como acudir a las reuniones de vecinos, religiosas o de trabajo, eventos sociales, etc. aunque nuestro papel al principio fuera modesto, pero logrando al menos familiarizarnos más con la situación grupal.
  • Hacernos un plan de EXPOSICIÓN gradual a las distintas situaciones sociales que nos agobian intentando hacer progresos pequeños pero continuados.
  • Suprimir las conductas anticipatorias que tanta ansiedad inducen al adelantar con los ojos de la imaginación mil situaciones agobiantes, humillantes y desagradables. Es mucho mejor no pensar y si tuviéramos que pasar por una situación temida, por ejemplo una boda, no sufrir hasta el momento en el que comience el banquete (y a ser posible tampoco en medio).
  • Tampoco conviene hurgar en la herida más de la cuenta, haciendo agoreras y cínicas disquisiciones de nuestro papel en el mundo. Es mejor concentrarse más en progresar que en criticarse a uno mismo.
  • Conviene facilitar el aproximamiento a los distintos ambientes estando al menos al día de las inquietudes y afanes por las que los humanos nos unimos en amistad (preocupaciones sociales, conocer la música actual, el deporte o las modas, procurando si cabe estar en un buen nivel como para poder más adelante tener algo que aportar).
  • Preocuparse por saber lo que la mayoría sabe (por ejemplo saber hacer una barbacoa, bailar, conocer los procedimientos administrativos, desenvolverse en un restaurante, etc.)
  • Disponer también de una personalidad propia (unos gustos, unas ideas conocidas, unas intereses, etc.) que pueda hacer atrayente y productiva nuestra incorporación en los grupos.
  • En los momentos de hablar en público no estar mirando con lupa nuestras sensaciones físicas perturbadoras sino los ojos de los interlocutores, y mirándolos comenzar a hablar LENTO y DETALLADO en vez de rápido y comprimido tal como el "salir rápido" del apuro nos pediría.
  • Hacer maniobras de preferencia, tales como sentarnos en el sitio de la mesa que más nos gusta y al lado de la persona que nos cae mejor o en el medio (en vez de sentarnos en el rincón más alejado y junto a la persona que menos nos gusta).
  • Si notamos que la voz nos tiembla, en vez de ultimar proseguir hasta que el efecto desaparezca, haciendo que el temblor inicial quede olvidado por un final aceptable o por la simple voluntad de expresarse.
  • No exigirse a uno mismo el imperativo más bien contraproducente de pretender ser inteligentes para los demás sino que en vez de RENDIR debemos cambiar la misión a PARTICIPAR.
  • Algunos fóbicos sociales han utilizado técnicas de INUNDACIÓN como aceptar un trabajo de cara al público, o presentarse voluntarios en una asociación para obligarse así a 'pasar por el tubo' y superar los problemas de una vez. Este método de 'sacar la muela a mano' no funciona siempre y puede ser una apuesta que sobrepase muestras verdaderas fuerzas.
  • Si nos sentimos preparados por haber avanzado en los puntos anteriores nos podemos atrever a llevar a cabo alguna actividad mas eficaz tal como apuntarnos a una asociación, un curso de expresión corporal, un taller de habilidades sociales (en el que mediante juegos didácticos, simulación de situaciones y ensayo de nuevos comportamientos, y en un ambiente de personas con similares dificultades a las nuestras podemos quemar etapas) o aceptar un trabajo que sabemos que nos pondrá a prueba.
  • Sería algo bueno de cara a superar los miedos el reflexionar más allá de lo mal que nos sentimos lo que hay de realidad en los supuestos peligros (miedo al rechazo, a que no nos valoren o a no resultar interesantes y dignos de amor que posiblemente provienen de algunos factores educativos mal aprendidos -o enseñados cabría decir-.

¿Y si no puedo?

Es el momento de acudir a un profesional. Existen distintas psicoterapias exitosas contra la fobia social, siendo un problema clínico relativamente sencillo de solucionar comparado con otros trastornos mentales mayores.
A veces la verdadera dificultad es el orgullo o la cicatería lo que nos impide reconocer que tenemos un grave problema y acudir a un profesional competente.

fuente: www.psicologia-online.com

miércoles, 7 de octubre de 2009

Vencer las crisis de ansiedad y la agorafobia

Ansiedad Social, Crisis de Ansiedad, y Agorafobia.

A continuación te adelantamos las siete claves que vamos
a desarrollar en este manual para que venzas tus crisis de
ansiedad. No te preocupes si no comprendes algún punto de
estas claves, dedicaremos todo este manual a explicar detalladamente
cada una de estas ideas y podrás leer bastantes ejemplos
para comprenderlas.

Clave 1: Mantén a raya el estrés y la tensión emocional
El estrés, y la tensión emocional que genera, suele ser el
detonante de las crisis de ansiedad. Una vez que has desarroclínicamoreno.
com 12
llado dos o más crisis de ansiedad es fácil que vuelvas a tener
más crisis en periodos de estrés, especialmente si tuviste miedo
a que tus crisis repitieran. Te puede parecer como una especie
de maldición pero tiene una explicación muy sencilla: el miedo
a las crisis de ansiedad se refuerza con cada crisis si no hacemos
nada por detenerlo. Una vez que tu cuerpo canaliza la tensión
emocional haciendo crisis de ansiedad, ése va a ser el modo
en el que más probablemente se presenten los nuevos episodios
de estrés. La persona que sufre dolores de espalda o de
cabeza como consecuencia del estrés ya sabe que ése es su punto
débil y que cuando llegue una época de estrés es muy fácil
que acabe teniendo dolores de cabeza o de espalda.
Las vías para controlar el estrés son múltiples. Dependiendo
de cómo llegas a estresarte, así deberás actuar para reducir
el estrés. Si tienes un trabajo agotador, estresante, o tienes
determinados problemas sin resolver que te desgastan emocionalmente,
es fundamental que trates de buscar soluciones a
esos problemas: revisa tus horarios, la distribución del tiempo y
las responsabilidades, revisa tus prioridades en la vida (¿Vivimos
para trabajar o trabajamos para vivir?), trata de ver con
distancia tus problemas personales, de pareja o familiares, y
busca ayuda profesional para tratar de resolverlos adecuadamente.
Un matrimonio estresante, o problemas que alteran la
vida familiar, pueden ser fuentes considerables de estrés y una
puerta abierta a la aparición de nuevas crisis de ansiedad. Puesto
que no todos los problemas tienen fácil solución, te enseñaremos
técnicas de relajación para aliviar la tensión emocional
que acumula tu cuerpo a consecuencia del estrés.
En momentos de estrés es fácil que se altere también la
respiración y que caigamos en una respiración superficial o
desajustada respecto de las necesidades de tu organismo, dando
lugar a episodios de hiperventilación que están muy conectados
con la aparición de los síntomas que pueden asustarte: taquicardias,
palpitaciones, mareos, sensaciones de irrealidad o de
clínicamoreno.com 13
extrañeza con respecto al medio o a ti mismo (sensación de
“volverse loco”), dolor en el pecho, etc. Te enseñaremos la
conexión profunda entre la respiración y estas sensaciones desagradables,
así como algunos ejercicios para recuperar un
patrón de respiración abdominal y tranquila que atenúe esas
sensaciones no deseadas.

Clave 2: Lee varias veces la información sobre el trastorno
de pánico; y si recaes, vuelve a leerla como si fuera nueva.
La información que aportamos sobre el mecanismo de
las crisis de ansiedad ayuda a tranquilizar a muchos pacientes.
No obstante, es fácil que con el paso del tiempo nos “olvidemos”
de lo que sabemos sobre las crisis de ansiedad y entonces
resulta más fácil volver a asustarnos con nuestras sensaciones
corporales. Releer una y otra vez esa información nos va a
convencer de la realidad. El mecanismo de las crisis es relativamente
sencillo, tan sólo es necesario creerlo para que uno
empiece a notar los efectos de esa nueva forma de ver el mundo.
Cuando uno tiene claro que no existe ningún peligro real
y está convencido de que “sólo es ansiedad” lo que uno tiene,
acaba de dar un gran paso en su dominio de las crisis de
ansiedad:
Los infartos no se producen por la ansiedad. Para
tener un infarto es necesario que tus arterias
estén en mal estado por la mala alimentación, el
consumo de alcohol o de tabaco.
La trombosis cerebral requiere también de un estado
de salud delicado y, al igual que ocurre con
los infartos, una mala dieta y la falta de ejercicio
físico moderado ayuda a que se desarrolle este
problema neurovascular.
El derrame cerebral se produce por la rotura de
una arteria cerebral, en lo que suele influir una
clínicamoreno.com 14
tensión arterial elevada y/o una arteria en mal
estado. No tiene nada que ver con la sensación
de que se nos podría romper una arteria en un
momento de ansiedad elevada.
Volverse loco no es algo que esté al alcance de
todos. Además de tener unos antecedentes familiares
suficientes, el proceso de enfermedad en
los trastornos mentales con desconexión de la
realidad no guarda ninguna relación con el desarrollo
de las crisis de ansiedad.
Clave 3: Para cambiar tus pensamientos y tus emociones no
basta con leer este manual, ¡debes ponerlo en práctica!
La realidad no es lo que nos pone nerviosos directamente.
Nos ponemos nerviosos en función de cómo interpretamos
la realidad. Por eso es importante “cambiar el chip” y dejar de
vernos a merced de nuestras sensaciones corporales, sin ningún
control. Todo ocurre en nuestra cabeza:
El dolor en el pecho se interpreta automáticamente
como “infarto inminente” y a partir de ahí se dispara
mi sensación de ansiedad (y como verás más adelante
en este manual: cuanta más ansiedad tengas,
más dolor en el pecho y más taquicardia tendrás).
La sensación de inestabilidad o mareo se interpreta
automáticamente como “estoy a punto de desmayarme”
ó “me voy a caer redondo al suelo en mitad
de esta plaza”.
La sensación de extrañeza o irrealidad se interpreta
como el principio del fin de la cordura: “me estoy
volviendo loco”.
En los ejemplos anteriores no tenemos en cuenta que las
interpretaciones de la realidad no siempre son tan fiables como
nos parecen. ¿Cuántas veces tendrías que haberte muerto de
clínicamoreno.com 15
infarto si hubieses tenido uno en cada crisis? ¿Cuántas veces te
habrías caído redondo al suelo si hubiera ocurrido eso en cada
crisis? ¿Y cuántas veces te habrías vuelto loco si hubiera ocurrido
eso en cada crisis?
Y, sin embargo, es difícil que el miedo se vaya por sí
solo. Esto es así porque parece que siempre podemos encontrar
alguna explicación para no haber visto el final temido, sea la
muerte por infarto, la locura sin fin, o cualquier otro catastrófico
final que se nos ocurra libremente. Algunas veces ocurre
que te pones la pastilla bajo la lengua y la ansiedad se calma.
Otras veces nos encontramos con alguien y nos relajamos sin
saber muy bien por qué. Y alguna vez parece que hemos estado
a punto de morir cuando de pronto todo comenzaba a pasar.
Si cada vez que uno tuviese una crisis acabara como
piensa que puede acabar no habría ninguna duda sobre los
síntomas. Sería la gran epidemia mundial si todos los que sufren
una crisis de ansiedad acabaran muertos o locos. Sin embargo,
son millones de personas en el mundo las que tienen
crisis de ansiedad cada día sin llegar a morir o enloquecer debido
a la ansiedad.
Por eso es importante que practiques los ejercicios que
te proponemos en este manual para aprender a cambiar el chip,
tomando buena nota de qué ocurre en tu cabeza para poder impedir
que los pensamientos irracionales tomen las riendas de la
situación en plena crisis de ansiedad.
Clave 4: Debes plantar cara a tus miedos si quieres vencer
tus crisis de ansiedad
Una buena forma de perder el miedo a las sensaciones
temidas es enfrentarse cara a cara con ellas, de modo repetido.
Ya sabes: la práctica hace al maestro. No es lo mismo “saber”
que a uno no le va a dar un infarto, que practicar ejercicios diversos
para comprobar que no ocurre nada aunque tengas una
taquicardia.
clínicamoreno.com 16
Esperamos convencerte de que este paso es imprescindible
para llegar a dominar las crisis de ansiedad. Al principio
es aceptable reducir los síntomas que temes para poder entender
bien qué está pasando, para eso va bien la relajación, las
técnicas de control de la respiración e incluso la medicación
ansiolítica. Sin embargo, una vez que no te has calmado —y
que ya sabes que todo se reduce a un temor irracional a nuestras
sensaciones corporales relacionadas con el estrés y la ansiedad—
llega el momento de hacer frente a ese miedo irracional,
enfrentándose a las taquicardias, los dolores en el pecho,
los mareos, la sensación de volverse loco y, en definitiva, todas
aquellas sensaciones que están provocadas por la misma ansiedad
pero que nos disparan las crisis.
Las estrategias para enfrentarse a los temores son diversas,
se trata de elegir la que mejor se adapte a tus necesidades
en cada momento. Tú eliges el ritmo: paso a paso, como el que
sube una escalera, o exposición masiva, como el que salta a la
piscina. Lo importante es que te pongas una fecha para ir enfrentándote
a los temores: tan rápido como sea posible y tan
lento como sea necesario.
Clave 5: La agorafobia se controla con la práctica
El miedo a la aparición de las crisis de ansiedad puede
dar lugar al desarrollo de temores agorafóbicos importantes.
Entonces resulta amenazante salir a la calle, ir a grandes almacenes,
sentarse en la silla del dentista, etc.
El miedo aquí es tan irracional como el miedo que sufres
cuando ya sabes que tus crisis de ansiedad son sólo ansiedad.
Muchas de las estrategias recomendadas para afrontar el
miedo a las sensaciones corporales también son aplicables en el
caso de la agorafobia. Es necesario ir haciendo frente a las situaciones
temidas tan rápido como sea posible y, de nuevo, tan
lento como sea necesario. Si resulta muy difícil hacer frente a
las situaciones temidas, es inteligente ponerse metas pequeñas,
clínicamoreno.com 17
tan pequeñas que casi parezca que no hacemos nada: si puedo
ir acompañada a unos grandes almacenes durante diez minutos,
puedo tratar de aguantar un minuto más, o dar un paso más,
antes de abandonar el centro comercial. Lo importante es cambiar
la actitud: dejar de anhelar escapar de la situación para ir
quedándome más y más tiempo. Dejar de evitar las situaciones
temidas para ir acercándome más y más a esas situaciones,
aunque sea muy poco hoy. Mañana tendré una oportunidad de
aguantar un minuto más o dar un paso más. Y si un día parece
que retrocedo y que no puedo enfrentarme a lo mismo de ayer,
no debo pensar que todo el esfuerzo ha sido para nada. El progreso
nunca es lineal. Mi mejoría va a ser como una especie de
baile con mi destino: un paso adelante, dos pasos atrás, dos
pasos adelante, otro paso adelante... Es importante tener paciencia
con uno mismo y no desesperar ante los pequeños retrocesos,
que casi siempre son inevitables. Lo importante es
mantener el empeño, mantener la dirección y seguir haciendo
aquello que en un momento dado nos ayudó a seguir adelante.
En muchas ocasiones, las recaídas vienen cuando abandonamos
los hábitos saludables que desarrollamos durante la terapia:
cuando dejamos de practicar la relajación, cuando dejamos de
hacer los ejercicios de respiración, cuando nos mantenemos en
situaciones estresantes sin darle remedio, etc...
Clave 6: La medicación es un recurso para casos graves
La medicación para las crisis de ansiedad sólo se justifica,
según los estudios científicos sobre el tema, cuando el
paciente presenta un cuadro depresivo conjuntamente, o experimenta
un malestar tal que es imposible la psicoterapia. En la
mayoría de los casos se recomienda iniciar el tratamiento de las
crisis de ansiedad con un enfoque psicológico, reservando la
medicación únicamente para cuando sea necesario. En ningún
caso debes tomar medicación sin haber consultado previamente
con tu médico. Tampoco debes cambiar por tu cuenta las dosis
clínicamoreno.com 18
de la medicación, pues corres riesgos innecesarios. Siempre
que sea posible, es más sano tratar de dominar la ansiedad por
tus propios medios —con ayuda de las técnicas que puedes
aprender aquí— que aceptar tomar medicación de por vida. A
largo plazo la medicación va siendo menos efectiva y sus posibles
efectos perjudiciales podrían verse aumentados.
Clave 7: Dominar las crisis de ansiedad es posible
Existe un abundante número de estudios científicos que
avalan los procedimientos psicológicos explicados en este manual
para el control de las crisis de ansiedad. Eso significa que
muchas personas que padecían este trastorno ahora pueden
hacer una vida normal. Nuestra experiencia personal en el tratamiento
de personas que sufren crisis de ansiedad también
avala la eficacia de los procedimientos que te vamos a enseñar.
Son muchos los pacientes que se han beneficiado de los mismos
a través de los años. Para que tú puedas beneficiarte tan
sólo es preciso que dediques tus energías a dominar estas crisis.
Es muy probable que logres dominar tus crisis de ansiedad.
¡Bien, vamos a ponernos manos a la obra!

Este texto es un extracto del manual del paciente del Curso a Distancia
“Vencer las crisis de ansiedad y la agorafobia”, publicado por el Dr.
Pedro Moreno y la Lda. Ana Gutiérrez, ambos psicólogos clínicos
especialistas en el tratamiento de los trastornos de ansiedad.
El curso incluye además un DVD con información en profundidad y 3
CDs con ejercicios de relajación y auto-hipnosis.
Para más información visite: www.clinicamoreno.com
© Pedro Moreno y Ana Gutiérrez, 2009
clínicamoreno.com 19

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Habilidades Sociales y Ansiedad Social: manteniendo conversaciones 1

Habilidades Sociales y Fobia Social: Conversando con los otros.

Hay un conjunto de procedimientos que pueden ayudarnos a sostener un dialogo con otros.
Los he probado, y son bastante eficaces. Recomiendo hacer lo mismo, y tambien afinar el oido a los dialogos de las otras personas, a fin de identificar cual procedimiento estan empleando.



Preguntas con final abierto/cerrado:
En estas el que responde no tiene muchas chances de respuetas, a no ser que este un tanto creativo. Por ejemplo:
- Que edad tenes?
- 47
- De que signo sos?
- Leo
Se dice que son cerradas porque admiten una respuesta (uno solo puede tener una edad y un signo).
Claro que si le hablamos a alguien inspirado o creativo, puede desarrollarse un dialogo, pero eso va a depender mas de la otra persona, que de las preguntas que estamos haciendo.
Por ejemplo:
- Que edad tenes?
- Ya no voy a la matinee...
Con las preguntas abiertas, la persona que responde tiene mucha mas libertad en el dialogo.
- Venis en taxi al trabajo? (Si/No)
-Cómo venis al trabajo? (En bondi, pero a veces creo que en lancha sardinera)


Libre informacion
Es aquella que no fue requerida directamente en la pregunta.
Expontaneamente, tendemos a compartir aquello que nos parece significativo, pudiendo brindar libremente mas informacion a la requerida por la pregunta.

- Que estudias?
- Psicologia. Pero me interesa la "terapia de grupos" tipo "Vulnerables", o la de pareja, la de "Tratame bien". Los viste alguna vez?

Autorevelaciones
Otra forma de dirigirnos a otros de forma mas asertiva, es aquella que se relaciona con la manifestacion de nuestros sentimientos y gustos. Esto es, llegar a un mayor grado de intimidad y amistad. Generalmente, la revelacion de intimidades produce intimidad, y la informacion superficial, intercambios superficiales, algo importante a la hora de desinhibirnos para vencer nuestra ansiedad social.

- Me gusta este articulo porque me da como ganas de experimentar...
- Si, a mi tambien me gusta, porque viste, parece una pavada, pero funciona...


Fuente: "Timido anonimo" (timidosanonimos@gmail.com)

ansiedad - ansiedad social - timidez - fobia - fobia social - asertividad - comportamiento asertivo - conductas asertivas - inhibiciones - verguenza - temor - autoestima - angustia - grupos - habilidades sociales


martes, 29 de septiembre de 2009

que son las emociones?

¿Qué es la emoción?

M.P. González, E. Barrull, C. Pons y P. Marteles, 1998

Hasta el trabajo de Wukmir (1967), nadie ha sabido dar una explicación coherente del fenómeno de la emoción. Todo lo que se ha dicho de ella y se sigue diciendo, son vaguedades y descripciones de sus efectos muy generales. En este artículo, queremos resumir la aportación de Wukmir al esclarecimiento definitivo del fenómeno emocional. Esperamos que la lectura detenida y reflexiva de este artículo pueda aclarar definitivamente al lector algo tan fundamental como es la naturaleza de las emociones.

Aproximación a la emoción

En cada instante experimentamos algún tipo de emoción o sentimiento. Nuestro estado emocional varía a lo largo del día en función de lo que nos ocurre y de los estímulos que percibimos. Otra cosa es que tengamos siempre conciencia de ello, es decir, que sepamos y podamos expresar con claridad que emoción experimentamos en un momento dado.

Las emociones son experiencias muy complejas y para expresarlas utilizamos una gran variedad de términos, además de gestos y actitudes. De hecho, podemos utilizar todas las palabras del diccionario para expresar emociones distintas y, por tanto, es imposible hacer una descripción y clasificación de todas las emociones que podemos experimentar. Sin embargo, el vocabulario usual para describir las emociones es mucho más reducido y ello permite que las personas de un mismo entorno cultural puedan compartirlas. En la siguiente tabla se muestran algunas tanto en sus vertientes positivas como negativas.


Emociones Positivas Emociones Negativas

Me siento... Siento... Me siento... Siento...

Bien Bienestar Mal Malestaruyj

Feliz Felicidad Desgraciado Desgracia

Acompañado Compañia Solo Soledad


La complejidad con la que podemos expresar nuestras emociones nos hace pensar que la emoción es un proceso multifactorial o multidimensional. Uno siempre tiene la impresión de que le faltan palabras para describir con precisión sus emociones.

Pero debajo de esta complejidad subyace un factor común a todas las emociones: cada emoción expresa una cantidad o magnitud en una escala positivo/negativo. Así, experimentamos emociones positivas y negativas en grados variables y de intensidad diversa. Podemos experimentar cambios de intensidad emocional bruscos o graduales, bien hacia lo positivo o bien hacia lo negativo. Es decir, toda emoción representa una magnitud o medida a lo largo de un continuo, que puede tomar valores positivos o negativos.

En el lenguaje cotidiano, expresamos nuestr

as emociones dentro de una escala positivo-negativo y en magnitudes variables, como "me siento bien", "me siento muy bien", "me siento extraordinariamente bien" (intensidades o grados del polo positivo) o "me siento mal", "me siento muy mal", "me siento extraordinariamente mal" (intensidades o grados del polo negativo).

Según sea la situación que provoca la emoción, escogemos unas palabras u otras como 'amor', 'amistad', 'temor', 'incertidumbre', 'respeto', etc., que, además, señala su signo (positivo o negativo). Y según sea la intensidad de la emoción escogemos palabras como 'nada', 'poco', ' bastante', 'muy', etc. y así, componemos la descripción de una emoción. Decimos, por ejemplo, "me siento muy comprendido" (positiva) o "me siento un

poco defraudado" (negativa).

En consecuencia, podemos reconocer en toda emoción dos componentes bien diferenciados. Por un lado, un componente cualitativo que se expresa mediante la palabra que utilizamos para describir la emoción (amor, amistad, temor, inseguridad, etc.) y que determina su signo positivo o negativo. Por otro lado, toda emoción posee un componente cuantitativo que se expresa mediante palabras de magnitud (poco, bastante, mucho, gran, algo, etc.), tanto para las emociones positivas como negativas. El cuadro siguiente trata de reflejar estos dos componentes de toda emoción.




Emoción como valoración o medida de la probabilidad de supervivencia

Ahora nos falta determinar a qué se refiere este componente cuantitativo (magnitud positiva o negativa) que contiene toda emoción. ¿Que es lo que mide cada una de nuestras emociones? ¿Qué significa 'positivo' y 'negativo' en nuestras emociones?

Los organismos vivos disponen de mecanismos perceptivos que les permiten reconocer aquellos estímulos que son significativos para su supervivencia: para obtener comida, para protegerse de un ataque, etc. Pero la percepción cubre sólo una parte del problema. La percepción tiene como objeto reconocer los estímulos, saber que son.

Esto no es suficiente para un ser vivo. Además, necesita saber si esto que ha percibido (que ya ha reconocido) le es útil y favorable para su supervivencia o no. ¿Qué mecanismos tienen los seres vivos para determinar si lo que han percibido es favorable para su supervivencia o no?

V.J. Wukmir (1967) planteó que tales mecanismos son las emociones. La emoción es una respuesta inmediata del organismo que le informa del grado de favorabilidad de un estímulo o situación. Si la situación le parece favorecer su supervivencia, experimenta una emoción positiva (alegría, satisfacción, deseo, paz, etc.) y sino, experimenta una emoción negativa (tristeza, desilusión, pena, angustia, etc.). De esta forma, los organismos vivos disponen del mecanismo de la emoción para orientarse, a modo de brújula, en cada situación, buscando aquellas situaciones que son favorables a su supervivencia (son las que producen emociones positivas) y alejándoles de las negativas para su supervivencia (que producen emociones negativas).

Por ejemplo, cuando entramos en una reunión, lo primero que hacemos es reconocer (percibir) a las personas que están en la sala y casi simultáneamente, empezamos a experimentar nuevas emociones relacionadas con la nueva situación. Si lo que sentimos es positivo y agradable significa que nuestro mecanismo emocional valora que la situación, lo que allí ocurre, es favorable para nuestra supervivencia (negocios, afecto, conocimientos, etc.). Por el contrario, si nos sentimos mal, inquietos, forzados, etc., significa que nuestro mecanismo emocional cree que la situación puede perjudicarnos.

Esta valoración emocional se realiza mediante mecanismos físico-químicos muy diversos dependiendo de la complejidad del organismo. Un organismo unicelular posee mecanismos simples para evaluar si una situación o estímulo le es favorable o desfavorable, mientras que un mamífero, por ejemplo, posee mecanismos emocionales mucho más complejos, en los que su sistema nervioso juega el papel fundamental.

Con la aparición y desarrollo del córtex, los procesos cognitivos participan de forma fundamental en la elaboración de las emociones. En particular, la importancia del neocórtex en la especie humana es tal que, los procesos cognitivos determinan en gran medida nuestras emociones. Pero el hecho de que el córtex y neocórtex participen en la elaboración de las emociones no significa que sea de forma consciente. La elaboración de las emociones es un proceso no voluntario, del que se puede ser sólo parcialmente consciente.

A menudo se habla del control emocional o de controlar las emociones como una habilidad necesaria para el buen desarrollo de nuestras relaciones sociales. En este caso, controlar las emociones significa que uno sea capaz de no mostrar las emociones que está experimentando. Es decir, no tenemos control sobre la emoción misma sino sobre su manifestación externa.

En definitiva, queremos decir que, por medio de la emoción, un organismo sabe, consciente o inconscientemente, si una situación es más o menos favorable para su supervivencia. La emoción es el mecanismo fundamental que poseen todos los seres vivos para orientarse en su lucha por la supervivencia.

Ahora bien, todo organismo puede equivocarse en su valoración emocional. Todo proceso de medida puede ser erróneo en grados variables. Los mecanismos emocionales, al igual que los perceptivos, son limitados y están sometidos a múltiples incidencias, tanto internas como externas, que disminuyen su eficacia. En consecuencia, la emoción experimentada puede no corresponder a la realidad de la situación y producir graves perjuicios al organismo. Es decir, una situación puede ser valorada positivamente (experimentar una emoción positiva), aunque, en realidad, sea muy perjudicial para el organismo.

Un ejemplo típico es el efecto droga. La droga es un estímulo capaz de engañar al sistema emocional produciendo emociones positivas, es decir, hacer que el organismo valore dicho estímulo como positivo para su supervivencia, cuando, en realidad es todo lo contrario. De hecho, en la vida de los seres vivos, los errores emocionales son frecuentes. Nuestra experiencia subjetiva nos enseña que muchas emociones experimentadas son incorrectas y que sólo mediante un gran esfuerzo de introspección puede desentrañarse el tipo de emoción que corresponde con nuestra realidad. Saber lo que sentimos verdaderamente es algo difícil de lograr. Esto no tendría mayores consecuencias si no fuese porque la emoción determina directamente todo nuestro comportamiento y el error nos sitúa en una posición de riesgo.

En resumen, Wukmir planteó que siendo la vida y la supervivencia lo positivo para un ser vivo, la emoción es el resultado de una medida (o valoración) subjetiva de la posibilidad o probabilidad de supervivencia del organismo en una situación dada o frente a unos estímulos determinados. La emoción informa al organismo acerca de la favorabilidad de cada situación. Diríamos, pues, que la emoción se comporta como una variable de estado intensiva (el valor total es igual al promedio de las partes). A cada estado de nuestro organismo le corresponde una emoción, que es más positiva cuando se trata de un estado más saludable, más orientado hacia la vida (orexis) y es más negativa cuando nuestro estado se acerca más a la enfermedad y la muerte (anorexis). Pero, como todo proceso de medida, las emociones están sujetas a errores que acaban perjudicando al organismo.

Referencias:

Wukmir, V.J., (1967): Emoción y Sufrimiento. Barcelona: Labor.

Links:

Emociones y salud por Enrique García Fernández-Abascal

Emoción. Breve reseña del papel de la cognición y el estado afectivo por Francesc Palmero

En Definition of emotion encontrarás un breve resumen del desconcierto general que existe acerca del fenómeno emocional.


fuente:http://www.biopsychology.org/biopsicologia/articulos/que_es_la_emocion.htm

ansiedad social - miedo - timidez - verguenza - inhibicion - fobia social - ansiedad - trastorno de ansiedad -


lunes, 28 de septiembre de 2009

fobia social y habilidades sociales

Escala de Interacción Social de Liberman
MANUEL PEÑATE QUINTANA, col. P 697
Correo-e: mapequin@cop.es
Publicado en Hojas Informativas de l@s Psicólogo@s de Las
Palmas, época II nº 69. Octubre 2004
COMPONENTES DEL ENTRENAMIENTO EN HABILIDADES SOCIALES
a) Instrucciones y definición de las habilidades a entrenar las instrucciones
consisten en explicaciones claras y concisas de las conductas que constituyen el
objetivo del entrenamiento en cada sesión.
b) Modelado: consiste en la ejecución, por parte del terapeuta y/u otras personas,
de la conducta objeto de entrenamiento, con el fin de que el sujeto tenga la
oportunidad de observarlas y, de este modo, se facilita el aprendizaje.
c) Ensayo conductual: se trata de la práctica, por parte del paciente de las
conductas adecuadas hasta que alcance un nivel de ejecución satisfactorio.
d) Reforzamiento: hacer seguir, contingentemente a una conducta determinada,
una consecuencia positiva, con el fin de aumentar, en el futuro, su probabilidad
de aparición
e) Feedback: consiste en suministrar información sobre la ejecución de las
conductas realizadas por el paciente.
ESTRATEGIAS DE GENERALIZACION
Son las que van hacer posible que lo aprendido en el contexto clínico se extienda
a otras situaciones, las principales se podrían resumir:
-Realización de ensayos múltiples, en contextos y con situaciones lo más
variadas posible, así como con el mayor número de interlocutoras distintos
que se pueda, también un número variado de respuesta en la misma situación.
-Implicar en el entrenamiento el mayor número de personas del ambiente natural
del paciente y lo más relevante para él.
-Entrenamiento en otras técnicas (auto-instrucciones, autocontrol, solución de
problemas, etc.) que faciliten al sujeto la puesta en práctica, fuera del contexto
clínico, de las conductas aprendidas.
CONCLUSIONES
La evidencia empírica revisada pone de manifiesto que el entrenamiento en
habilidades psicosociales resulta útil para el logro de:
1. Mejoras en las habilidades conductuales de los pacientes como son: contacto
ocular, postura, inicio y mantenimiento de conversaciones, etc.
2. Una moderada generalización de las habilidades aprendidas al medio natural
del sujeto.
HOJAS INFORMATIVAS
Iltre. COLEGIO OFICIAL DE PSICÓLOGOS DE LAS PALMAS
Nº 69
Época II
Octubre
2004
3. Una reducción de la ansiedad social, es decir, de la ansiedad que los pacientes
experimentan durante las interacciones sociales.
4. Un descenso de las recaídas y, consiguientemente, del número de
rehospitalizaciones.
Sin embargo, es necesario señalar que el entrenamiento en habilidades
psicosociales no es la solución para todos los síntomas, problemas de
funcionamiento que presentan los pacientes esquizofrénicos, de aquí que deba
ser visto como un componente dentro del más amplio tratamiento que necesita.
ESCALA DE INTERACCION SOCIAL (LIBERMAN ET AL.,1989)
La escala que aquí se presenta está pensada para la evaluación de las
habilidades psicosociales de pacientes psiquiátricos con trastornos severos e
incapacitantes, en su ambiente (p.e. unidades de internos, hogares de transición,
hospitales de día...)
Este procedimiento utiliza la observación directa, con la que supera los
problemas de otros procedimientos de evaluación para obtener información
adecuada que permita la evaluación de pacientes con distintas discapacidades.
Objetivos
El objetivo de esta escala es doble:
1.- Asegurar que todos los pacientes, clientes o residentes, tendrán contactos
frecuentes con distintos miembros de la plantilla que pueden ayudarles a
practicar sus habilidades de conversación.
2.- Proporcionar una evaluación continua del comportamiento interpersonal del
paciente que pueda utilizarse para determinar los cambios y mejorar, así como
para indicar los déficit que requieren entrenamiento o intervención terapéutica.
Esta escala tiene la ventaja añadida de permitir la evaluación de la conducta
interpersonal en dos tipos de situaciones diferentes: durante un período
relativamente no estructurado en la unidad y en la conversación uno a uno con
un miembro de la plantilla. Por otra parte, proporciona datos relevantes para la
planificación de tratamiento, la evaluación de la evolución y la predicción del
ajuste futuro al hospital o a la comunidad.
Procedimiento
La hoja de registro está dividida en dos categorías: observación conductual de
interacción social y conducta conversacional.
Puede administrarse con tanta frecuencia como permita la disponibilidad de la
plantilla o el horario del paciente, aunque cuatro veces al día es el mínimo
aconsejable para obtener información fiable. El momento exacto en que se
comienza la observación se determina a priori y se marca en la hoja de registro.
Observación conductual de la interacción social
A las horas prefijadas para la observación, el observador se dirige hacia la
unidad, habitación, sala,...donde se encuentra el paciente. Cuando llega, anota la
Actividad y las Características Inapropiadas del paciente. Se debe registrar la
conducta del paciente en el momento en que se le ve (p.e. en el primer golpe de
vista).Si el paciente no está en la unidad en ese momento, se señala en la hoja
de registro "no observado" en las casillas correspondientes a Actividad y
Características Inapropiadas bajo el nombre el paciente.
Conducta Conversación
HOJAS INFORMATIVAS
Iltre. COLEGIO OFICIAL DE PSICÓLOGOS DE LAS PALMAS
Nº 69
Época II
Octubre
2004
Después de completar la observación conductual el "observador" inicia una
conversación con cada paciente con curiosidad activa sobre la persona y con la
determinación de descubrir más de cerca de él/ella mediante un intercambio de
información, opiniones, sentimientos,...Para poder evaluar en el registro las
habilidades de conversación del paciente, ha de generar una conversación en la
que ambas partes intervenga .La conversación debe mantenerse, al menos,
durante tres minutos, pero no más de cinco
Después de la conversación se evaluará, o puntuará, cada una de las conductas
que aparecen en el apartado correspondiente a Conducta Conversacional en las
hojas de respuesta.
Definición y criterios para la puntuación en la Escala de Interaccion Social
- Observación Conductual
a) Actividad: la actividad puede registrarse como AISLADA o Interactivo. Estas
categorías son mutuamente excluyentes, es decir, cada paciente puntuará en una
y sólo una de las categorías.
- AISLADA: las actividades aisladas son aquellas conductas en las que un
paciente participa solo. Las conductas en esta categoría no están relacionadas
con la proximidad física o el contacto ocular con otros pacientes. Las conductas
aisladas pueden dividirse en dos categorías: activa e inactiva.
1. Activa: esta categoría incluye actividades en la que solamente está implicado
un paciente.
1. Positiva: al menos dos o más personas deben estar implicadas en una
actividad adecuada, es decir, conductas ejecutadas activamente con la intensidad
y fuerza adecuada para la situación. O bien, el paciente trabaja
constructivamente con, al menos, otro sujeto. Estas conductas incluyen charlas,
escuchar, jugar o trabajar con otro.
2. Negativa: esta categoría incluye actividades que son clínicamente
inapropiadas, es decir, conductas cuya fuerza, intensidad o contenido están
desadaptadas con respecto al tiempo, el lugar o la circunstancia, o debido a la
violación de los derechos de los demás Esta categoría incluye conductas como
gritar, golpear, dar patadas, tirar del pelo.... y otras conductas agresivas.
Si se observan comportamientos en dos o más de las categorías de Actividad
durante el breve intervalo de observación, se seguirán las siguientes reglas de
prioridad para establecer cual de las conductas se puntuará:
a) Si se observan conductas en dos o más de las categorías de Actividad
durante el breve intervalo de observación siempre puntuar la categoría de la
PRIMERA conducta observada. Por ejemplo, si se observa una interacción
positiva y luego el paciente se implica en una conducta aislada se puntuará o
anotará solamente la interacción positiva
b) Si durante el breve intervalo de observación aparecen simultáneamente
conductas interactivas y aisladas, se puntuará solamente el comportamiento
interactivo.
c) Si durante el breve intervalo de observación aparecen simultáneamente
interacciones positivas y negativas, se puntuará solamente la interacción
positiva.
HOJAS INFORMATIVAS
Iltre. COLEGIO OFICIAL DE PSICÓLOGOS DE LAS PALMAS
Nº 69
Época II
Octubre
2004
d) Si durante el breve intervalo de observación aparecen simultáneamente
conductas aisladas activas e inactivas, se puntuará solamente el comportamiento
activo.
CONDUCTAS CONVERSACIONALES
A. Contacto ocular
1= Ninguno o muy poco contacto ocular; excesiva fijación ocular
2= Alguna evitación
3= Contacto ocular adecuado durante la interacción.
B. Cantidad de discurso.
1= Ninguna o muy poca respuesta a las preguntas; discurso telegráfico;
divagaciones continuas sobre un mismo tema durante la mayor parte de la
conversación
2= Cantidad de discurso mínima necesaria para participar en la conversación;
hablar un poco en exceso sobre un tema.
3= Correcta; usa la cantidad de discurso suficiente para que uno entienda el
tema; da respuestas completas a las preguntas e incluye voluntariamente
información adicional cuando es apropiado.
C. Velocidad de habla.
1= Tan lenta que no se entiende lo que dice; o tan rápida que no puede
comprenderse.
2= Comprensible, pero obviamente demasiado rápida o lenta.
3= Correcta.
D. Volumen de voz.
1= Muy bajo/inaudible; muy alto/gritando sin razón aparente.
2= Bajo/apenas audible; alto sin razón aparente.
3= Correcto-fácilmente audible a una distancia de tres pies.
E. Inflexión de la voz.
1= Plana, monótona, sin inflexión; excesiva, con inflexiones forzadas excesivas.
2= Inflexiones inadecuadas o poco frecuentes; frecuencia moderada o con
inflexiones forzadas.
3= Correcta; utiliza las inflexiones adecuadas y las apropiadas al contenido del
discurso.
F. Inteligibilidad (coherencia) del discurso.
1= Muy pobre; el discurso se ve oscurecido por distorsiones gramaticales, tales
de conexión lógica entre una parte de la frase y otra o entre oraciones.
2= El discurso es, en general, comprensible, pero algunas palabras o frases no
están claras.
3= Correcto; el discurso es claro y comprensible; sólo ocasionalmente alguna
palabra o frase es ininteligible
G. Adecuación del discurso (razonamiento y relevancia).
1= Muy pobre; discurso ilusoria y/o no relacionado con la conversación; ignora el
discurso de la otra persona. Irrelevacias repentinas. Frases pedantes y
respuestas fuera de lugar. Largas pausas entre palabras.
2= Discurso ilusorio y/o no relacionado mínimo; mínima oscilación de temas.
3= Correcta; pregunta y responde en los momentos adecuados durante la
conversación; no oscila en los temas ni interrumpe: discute temas considerados
HOJAS INFORMATIVAS
Iltre. COLEGIO OFICIAL DE PSICÓLOGOS DE LAS PALMAS
Nº 69
Época II
Octubre
2004
en general apropiados para la interacción social entre conocidos y amigos
principales
ESQUEMA DE LAS SESIONES PARA EL ENTRENAMIENTO DE LAS
HABILIDADES NO VERBALES
1.- EXPLICACION: qué son, cuál es su utilidad, cuales son las pausas entre
palabras.
2.- CONTACTO OCULAR: Mirar a otra persona en o entre ojos o más
generalmente en la mitad superior de la cara. El establecimiento del contacto
ocular a menudo hace que comience una interacción durante la cual el que
escucha mira normalmente al que habla, cuya mirada puede desviar una
buena parte del tiempo mientras habla.
3.- EXPRESION FACIAL: La cara es el principal sistema de señales para
mostrar las emociones además de ser el área más importante y compleja de la
comunicación no verbal y la parte del cuerpo que más de cerca se observa
durante la interacción.
La expresión facial es la configuración formada a partir de los movimientos de los
músculos de la cara necesarios para expresar, de forma no verbal, los siguientes
tipos de emociones: alegría, tristeza, enfado/ira, sorpresa, miedo, desprecio.
La expresión facial adecuada es aquella que se corresponde con la situación en
la que se interacciona (expresión de tristeza en un funeral, expresión de alegría
cuando se ve a alguien que se quiere, etc.).
4.- LA SONRISA: actúa como lo contrario de todas las emociones negativas
(temor, ira...) forma parte de los saludos conversacionales y suele ser requerida
en la mayoría de los intercambios sociales corteses.
5.- POSTURA CORPORAL: Se denomina postura corporal a la disposición
coordinada de los miembros del cuerpo con respecto al interlocutor. La posición
del cuerpo y de los miembros, la forma cómo una persona se sienta, cómo está
de pie y cómo pasea, refleja sus actividades y sentimientos sobre sí misma y
su relación con los otros.
6.- LOS GESTOS: son los movimientos que una persona realiza con la cabeza,
manos y pies. Los gestos son básicamente culturales. Las manos y, en un grado
menor, la cabeza y los pies pueden producir una amplia variedad de gestos que
se usan para una serie de propósitos diferentes. Los gestos son también muy
eficaces para ilustrar los objetos o las acciones difíciles de ver balizar.
7.- AUTOMANIPULACIONES: son movimientos y gestos que hace una persona
para tocar cualquier parte de cuerpo o de ropa. La conducta de autocontacto
ocurre cuando tocamos nuestro cuerpo. Esta conducta nos proporciona bienestar
y señales genuinas con respecto a nuestro estado de humor interno. Dicho
movimiento se realiza normalmente con poco conocimiento y sin intención de
comunicar y de forma estereotipada y pueden interferir en la comunicación
verbal
8.- DISTANCIA-PROXIMIDAD FISICA: es la separación física que se mantiene
con el interlocutor. Existe una presencia de normas implícitas dentro de
cualquier cultura que se refiere al campo de la distancia permitida entre dos
personas que hablan. El grado de proximidad expresa claramente la naturaleza
de cualquier encuentro. Los seres humanos prefieren ponerse más cercas de
aquellas personas que les agradan y más lejos de los que no son de su gusto.
HOJAS INFORMATIVAS
Iltre. COLEGIO OFICIAL DE PSICÓLOGOS DE LAS PALMAS
Nº 69
Época II
Octubre
2004
Los amigos se ponen más cerca que los simples conocidos y los conocidos más
cerca que los extraños. Algunos autores señalan que los pacientes mentales
necesitan más espacio personal que otras personas.
9.- CONTACTO FISICO: tocar con alguna parte del cuerpo al interlocutor dentro
del contexto de comunicación. El contacto corporal es el tipo más básico de
conducta social, la forma más íntima de comunicarse y la forma biológica básica
de expresar actitudes interpersonales.
1O.- EMPATIA: siempre que hablamos con otras personas nos gusta saber si
nos están entendiendo, al igual que a nuestro interlocutor le gusta saber si le
comprendemos. Al compartir en nuestros contactos interpersonales estamos
compartiendo la alegría, el optimismo, la tristeza e incluso llegamos a ponernos
en el lugar del otro intentando comprender lo que él siente. Es la habilidad para
conectar con los sentimientos y emociones de los otros, es decir, la habilidad
para demostrar a nuestro interlocutor que sabemos cómo se siente, para
ponernos en su lugar.
BIBLIOGRAFÍA
- American Psychiatric Association (APA) Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorder
(4rd ed.) Washington, D.C.
- Anthony W.A.; Cohen M. y Farkas, M. (199O) Psyciatric Rehabilitation . Baltimore: Universty
Park Press.
- Anthony W.A. y Liberman R.P. (1986) The practice of psychiatric rehabilitation; Historical,
conceptual and research base.
- Bellack, A.S.; Sayers M.; Mueser, K.T. y Bennett, M. (1994). Evaluation of social problem
solving in schizophreina.
- Benton, M.K. y Schoroeder, H.E. (199O) Social skills training with schizoprenics: A metaanalytic
evaluation.
- Caballo, V. (1987) Evaluación de las habilidades sociales. En R. Fernández-Ballesteros y J.I.
Carrobles (eds.) Evaluación conductual (3ª ed). Madrid. Pirámide.
- Liberman R.P. (1982) Assessment of social skills.Schizophenia Bulletin.
- Liberman, R.P. (1991) Handbook of Psychiatric Rahabilitation Nueva York.
- Liberman, R.P. (1993) Adiestramiento en habilidades sociales En R.P. Liberman (eds)
Rehabilitación integral del Enfermo Mental Crónico. Barcelona: Martínez Roca (original 1988).
- Liberman, R.P.; DeRisi, W.J. y Mueser, K.T.(1989). Social skills. Training for Psychiatric
Patients Nueva YorK.
- Liberman, R.P. Mueser, K.T. y Wallace, C.J. (1986 ) Social skills training for schizophenic
indiviudals at risk for relapse.
- Mueser, K. (1993) Schizophenia.En A.S. Bellack y M Hersn (eds). Handbook of Behavior
Therapy in the Psychiatric Setting Nueva York.
- Mueser, K. y Sayers, M.D. (1992). Social skills assessment.En D. J. Kavanagh (ed)
Schizophemia An Overview and Practical Handbook. Londres.
- Vizcarro, C. (1994). Evaluación de las habilidades sociales. En R.Fernández-Ballesteros (ed)
Evaluación Conductual Hoy. Un enfoque para el Cambio en Psicología Clínica y de la Salud.
Madrid: Pirámide.
- Yuste G.C. y Garcelán, S.P. (1992).Entrenamiento en habilidades sociales en una unidad de
rehabilitación psicosocial.En F.Gil J.M León y L. Jarana (eds) Habilidades Sociales y Salud

domingo, 27 de septiembre de 2009

ansiedad social, ruborizacion y dismorfia corporal

Ruborización: ¿Ansiedad Social o Dismorfia Corporal?
Dr. Gustavo Daniel Bustamante
Vicepresidente Fundacion Fobia Club, Departamento Psicologia
Dr. Óscar Raúl Carrión
Presidente Fundacion Fobia Club, Departamento de Psiquiatría

Resumen

La ruborización inmotivada excesiva o el enrojecimiento facial (blushing) es conocida antiguamente como eritrofobia (del griego erythros, rojo: erythrophobia) fobia a ruborizarse o ereutofobia (del griego ereutos, rojo: ereutophobia) fobia al color rojo. Casper ya en 1842, nos describe muy bien los cuadros de eritrofobia. Esta característica es muy frecuente en poblaciones de origen celta o de los países nórdicos. Ya que la pigmentación de la piel es un rasgo de vulnerabilidad.

La fobia social esta caracterizada por reacciones de vergüenza frente a situaciones sociales: ser el centro de la atención, miedo a ser observado y a ser evaluado. Estas reacciones de vergüenza se manifiestan generalmente con reacciones corporales tales como enrojecimiento facial, calor, sudor, palpitaciones. Y una tendencia a evitar dichas situaciones que son las que le generan ansiedad. Este tipo de sensación se va retroalimentando logrando alcanzar una autonomía (kindling) que activa dichas sensaciones con solo pensar en estar en dichas situaciones.

La dismorfia corporal por otro lado se caracteriza por una sobredimensión de las preocupaciones normales por la apariencia física. Dicha preocupación le insume al paciente mucho tiempo a lo largo del día, esta se intensifica mas en situaciones sociales en donde las personas esperan que los otros los miren u observen. Esos síntomas son difíciles de controlar y suelen consumir mucho tiempo diario al desembocar en conductas repetitivas como examinarse atentamente al espejo, compararse con otros, arreglarse excesivamente o camuflar aquella parte del cuerpo con la que están disconformes.

En el caso de que el paciente se ruboriza excesivamente, se nos plantea una encrucijada y una duda diagnostica: Los pacientes con tales características se diagnostican como: Trastorno por Ansiedad Social o Fobia Social o como un Trastorno Dismorfia Corporal? O son parte de un mismo Espectro? O corresponden a características sintomáticas dimensionales?

Trastorno por ansiedad Social o fobia social

El trastorno por ansiedad social o fobia social se define por "un temor acusado y persistente a una o más situaciones sociales o de actuación en público en la que la persona se ve expuesta a gente desconocida o al posible escrutinio por parte de los demás" (APA, 1994). Esta puede ser parcial, es decir limitada a situaciones o generalizada.

A partir de los datos de la National Comorbidity Survey (realizada entre 1990 y 1992), Magee, Eaton, Witchen, Mc Gonagle y Kessler (1994) señalan que la fobia social afecta al 13,3% de la población general, representando el tercer trastorno psiquiátrico de mayor frecuencia en los Estados Unidos (después de la depresión mayor y el alcoholismo), lamentablemente en Argentina no hay estadísticas. Las consecuencias del trastorno se extienden a todos los ámbitos de la vida del individuo, tales como el social, el académico y el laboral.

Ahora bien, a pesar de su frecuencia y de lo incapacitante que resulta para el individuo que lo padece, es un trastorno que recibe escasa atención en la practica clínica en todo el mundo. Según Hirshfeld (1995), la confusión entre fobia social y timidez extrema ha llevado consigo la infravaloración del trastorno y la consecuente menor demanda de tratamiento especializado. En esta línea, síntomas de un trastorno de ansiedad social pueden ser interpretados por la persona que lo padece como manifestaciones de una timidez extrema, no acudiendo por ello a tratamiento (Cervera, Roca, Bobes, 1998).

Al ser este un trastorno "nuevo", ya que su inclusión en los manuales de clasificación de las enfermedades mentales data de 1980, existen múltiples líneas de investigación; entre las más destacadas están las que plantean el origen biológico del trastorno y las que acentúan su adquisición ambiental.

En la línea de investigación que menciona que la base etiológica de la enfermedad son los factores genéticos, Kendler y col. (1992) señalan una heredabilidad genética en un 30% del trastorno de fobia social o al menos la predisposición a sufrir uno de los trastornos de ansiedad en la misma proporción. Estudios con familiares de ansiosos demuestran que si bien la probabilidad de sufrir un trastorno de ansiedad es alta, no necesariamente se hereda el mismo trastorno de ansiedad que los familiares. La correspondencia familiar más alta en la fobia social es en los que sufren fobia social generalizada a diferencia de los que la sufren en la forma parcial. (Weissman, 1990). Para otros autores los familiares de los fóbicos sociales tendrían tres veces mayor riesgo de padecer la patología (Fyer, 1993). Rosenbaum et al. (1991) en un estudio en el que encontraron una correlación del 80% entre el padecimiento de altos niveles de ansiedad interpersonal en los padres y conductas de timidez en los hijos.

Curso: Algunos individuos sitúan el inicio del cuadro al principio de la segunda infancia. La aparición del trastorno puede seguir bruscamente a una experiencia estresante o humillante, o bien puede hacerlo de forma lenta e insidiosa. El curso de la fobia social acostumbra a ser crónico o continuo. A menudo persiste durante toda la vida, si bien a veces remite total o parcialmente en el transcurso de la edad adulta. La intensidad del trastorno y sus consecuencias en la actividad diaria dependen principalmente de los acontecimientos vitales estresantes y de las exigencias sociales del lugar o de la profesión.

Dismorfia Corporal

El término dismorfofobia lo acuñó el psiquiatra italiano Enrique Morselli a finales del siglo XIX, para describir a pacientes que temían ser deformes o creían ser deformes. Etimológicamente proviene de la palabra griega dysmorfia, que significa fealdad del rostro.

Aunque el DSM IV actualmente lo denomina dismorfia corporal bajo los siguientes criterios:

A.- Preocupación por algún defecto imaginario del aspecto físico. Cuando hay leves anomalías físicas, la preocupación del individuo es excesiva.

B.- La preocupación provoca malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.

C.- La preocupación no se explica mejor por la presencia de otro trastorno mental (p.ej. la insatisfacción con el tamaño y la silueta corporal en la anorexia nerviosa)

En general aparece en porcentuales semejante en hombres y mujeres. Aunque los estudios demuestran que el inicio comienza en la adolescencia, época en la que el individuo está más preocupado de su autoimagen y la vida social y se siente más observado, siendo la edad media de inicio los 17 años.

La prevalencia es bastante confusa debido al ocultamiento de la enfermedad, se cree que se encuentra alrededor del 1,5%, aunque puede ser mayor por tal motivo. Muchos autores estimaron que alrededor de un 2% de los pacientes que demandan un tratamiento quirúrgico presentan un TDC.

Estos pacientes no solicitan una consulta psiquiátrica y llegan a ella cuando el cirujano plástico, el otorrinolaringólogo o el dermatólogo los remiten. La media de espera en solicitar tratamiento varios años.

Las direrentes etiologías

Factores biológicos: Se deduce por la acción de los psicofármacos que estarían involucradas las vías serotoninergicas, ya que algunos tratamientos con IRSS se han encontrado como exitosos. Además se han observado imágenes cerebrales que coincidirían con áreas de disfunción similares al TOC.

Factores psicológicos: Características Individuales como: ansiedad, ideas perfeccionistas, depresiones, hacen mas vulnerables algunos sujetos a desarrollar este trastorno. Sumándoles la historia vital a cada uno de ellos.

Factores sociales y culturales: Los factores que se generan socialmente a través de ideales y constructos sociales de la imagen corporal por los medios de comunicación determinan de alguna manera ciertos modelos a los cuales estos sujetos se ven sometidos.

Un caso clínico

S. es una paciente sexo femenino de 25 años. Estudiante Universitaria. Vive con su madre y su hermana. Se presenta en la consulta a partir de que determina que su "rubor inmotivado" le esta causando deterioros en su calidad de vida. Y que ha perdido varias situaciones sociales que ha empezado a evitar o en estas s e ha sentido incomoda o ha tenido un mal desempeño.

Se hace la evaluación de Fobia Social y muestra en la escala de Liebowitz un puntaje Elevado en la ansiedad social 58, con un nivel menor en evitaciones de 51 puntos. La escala de depresión BDI es de 26 puntos. En el examen de personalidad a través del MMPI-2 se observa una configuración con escalas aumentadas como 2 (Depresión), 8 (Esquizofrenia) 0 (Ansiedad Social). Así como las subescalas de Ansiedad, Preocupación por la Salud, depresión, Interferencias Laborales y la más aumentada Disconfort Social. Cuenta que su madre sufre de rosácea y que sus orígenes son irlandeses (ella es nieta directa a pesar de que vive en Argentina).

Este rubor se presenta en situaciones como exposiciones orales en la universidad, contacto con desconocidos, ingreso a grupos, interacciones con autoridades. En la evaluación también observamos características de su lenguaje corporal francamente inhibidas: por ejemplo "cara de póquer", brazos cruzados durante todas las sesiones. Contacto verbal poco fluido, monosílabos, etc. Es por ello que consideramos que un entrenamiento en habilidades sociales y asertividad, en un grupo de fobia social sería lo indicado en un tratamiento integrado con psicofármacos (Paroxetina y Alprazolam).

A lo largo del tratamiento, ella determino un nivel de mejoría subjetiva con avances en sus creencias sobre temas generales de la interacción social. Pero su preocupación sobre el rubor no ha disminuido, y muy por el contrario continua comprando cremas para ocultar sus pómulos rojizos y continua a la espera de encontrar los medios materiales como para afrontar una video cirugía para el enrojecimiento facial.

Si bien el motivo de la presentación del caso no es desalentar las futuras intervenciones psicológicas, estas como verán se encuentran un tanto condicionadas. Puesto que los comentarios de la paciente son "si yo solucionara el tema de ponerme colorada, ya no tendría ningún tipo de problemas". Este pensamiento ha sido confrontado por varios integrantes de su grupo de ansiedad social, e incluso por otros a los cuales el rubor también les preocupaba y que actualmente les ha "dejado de preocupar". A lo cual ella agrega "me operare y seré libre". La intención de la presentación del caso es tratar de ver particularidades dentro de los grandes paquetes diagnósticos y de las dificultades que nos llegan a diario en la consulta clínica.

Discusión

Respondiendo a las preguntas iniciales: Los pacientes con tales características se diagnostican como: Trastorno por Ansiedad Social o Fobia Social o como un Trastorno Dismorfia Corporal? O son parte de un mismo Espectro? O corresponden a características sintomáticas dimensionales? Trataremos de dar algunas explicaciones ad hoc.

Creemos que la ansiedad social y la dismorfia corporal psicológicamente encuentran algunos comunes denominadores comos son el perfeccionismo y la autoexigencia. Ambas reguladas por la imagen de si mismo o construcción psicológica con la cual tienen una colaboración reciproca. No olvidemos que la autoestima se constituye también a través de la imagen corporal, la imagen de sí mismo y el autocontrol. Es decir: Como nos percibimos? Y qué actitud tenemos ante esta percepción? Cuando sumamos factores comunes en la constitución de la personalidad como Hipersensibilidad a la evaluación externa, Inseguridad, Bajo concepto de si mismo, Dificultades de interacción, Perfeccionismo y Autoexigencia y un Hipercriticismo: podríamos estar frente aun posible cuadro de FOBIA SOCIAL o DISMORFIA CORPORAL.

Lo que nos va a llevar a que el individuo tenga creencias distorsionadas y conductas o comportamientos desajustados, así como sensaciones físicas "desagradables". Influyendo en su vida social, laboral, académica e intra-interpersonal. Lo cual creemos que nos lleva una vez más a tratar de evaluar los aspectos clínicos en sus formas dimensionales y no categoriales, ya que de esa forma se podrían explicar mejor los mismos. Sin olvidar que las clasificaciones de las enfermedades se producen por construcciones acordadas de definiciones que no siempre reflejan las realidades y que necesitan una constante revisión.


Bibliografía

  • 1. Anthony Martín (2000). Phobic Disorders and panic Adults: a guide to assessment and treatment. American Psychological Association. 2000.
  • 2. Bobes Garcia, Gonzalez Garcia-Portillo, Saiz Martinez, Bousoño García. (1999) Abordaje Actual del Trastorno por ansiedad social. Ed. Masson. España. 1999.
  • 3. Cervera, Roca, Bobes, (1998). Fobia Social. Masson.
  • 4. D.S.M. IV,(1994) American Psychiatric Association, . Masson.
  • 5. Enguix, Beannasar, Bobes Gracía (1998). Fobia Social.Editorial Masson. España.
  • 6. Heimberg (1995). Social Phobia: Diagnosis, Assesment and Treatment. Guildford Press.
  • 7. Spatz, H., Carrión, O., Bustamante, G.. (1999) "Monoaminooxidasa plasmatica y plaquetaria en los trastornos de ansiedad": ALCMEON, Revista Argentina de Clínica Neuropsiquiátrica, vol. 8, N°1, Junio 1999, 51 a 58.

Dr. Gustavo Daniel Bustamante
E-Mail: bustamante@fobiaclub.com

Dr. Oscar R. Carrión
E- mail: oscarcarrion@fibertel.com.ar


fuente:http://www.aata.org.ar/anxia/007/pag13.html