Cómo ver una película (Educación Primaria)

2

Las imágenes y el sonido

b. El montaje

El montaje es el proceso por el que se ordenan los planos y secuencias de una película según los criterios del o la directora y el ritmo marcado en el guión. Si tuviéramos que elegir una palabra que resumiera el proceso sería “cortar”. En una película se ruedan muchísimos más planos de los que vemos en la película. Así como en el rodaje se decide qué queda fuera del encuadre, en el montaje se elige qué fragmento del plano se usa y cuál no. Montar es decidir que se queda fuera. Esta decisión del editor o editora (en España son las mujeres quienes ocupan mayoritariamente y con más prestigio esta profesión) es la que hace que una película nos cuente la historia de una manera y no de otra.

Existen multitud de factores que afectan al montaje. Vamos a detenernos en los dos principales: el plano y el relato. Si atendemos a la escala y duración del plano existen dos montajes diferentes:

  • Analítico: se utilizan fundamentalmente planos cortos y en general de corta duración. Se presta más a lo expresivo y psicológico. Se analiza la realidad estudiándola por partes y el resultado es un ritmo rápido.
  • Sintético: los encuadres elegidos contienen planos largos y con profundidad de campo. Se da una visión más completa de la realidad, sin voluntad de análisis. Como aparecen más objetos y más hechos, exige planos de más duración para poder tener bastante tiempo de lectura.

Además y según la totalidad del relato, el montaje puede ser:

  • Narrativo o clásico: cuenta los hechos, o bien cronológicamente o haciendo saltos tanto al futuro (flash-forward) como al pasado (flash-back) pero siempre estructurándose con la idea de dotarlas de forma narrativa.
  • Expresivo: prima la una interpretación artística o ideológica de la realidad cinematográfica. La longitud, movimiento, sonido y tono de los planos y la composición de los encuadres despertará en los espectadores y espectadoras emociones e ideas diferentes.

Si nos fijamos en los planos elegidos para el montaje, hay dos tipos muy diferentes. En primer lugar, los primeros 30 minutos de película. La sucesión de planos abiertos y generales de esta primera parte nos cuenta qué ha pasado en la Tierra. Son la presentación de Wall·E y Eva. Planos largos con gran profundidad de campo que invitan a mirar, sin prisa, un planeta solitario. Vemos el trabajo diario de Wall·E, casi como en un documental donde la ausencia de diálogos aumenta la sensación de soledad. En segundo lugar, la acción que transcurre en la nave. A diferencia de la parte anterior, aquí es fundamental la acción. Lo importante no es tanto ver el escenario sino acompañar a Wall·E y Eva en su aventura. La pelea del comandante con AUTO, la persecución de Wall·E y Eva, la rebelión de los robots…son acciones en las que los planos cerrados y su ritmo rápido contribuyen a que nos sintamos parte de esa escena.

Desde el punto de vista del relato, Wall·E responde a un tipo de montaje clásico. Las acciones se nos cuentan en orden cronológico, según suceden: Wall·E encuentra la planta, Eva llega a la tierra, Wall·E se enamora y la sigue por el espacio, Eva llega a la nave… En la narración no hay saltos en el tiempo, aunque conocemos hechos que ocurrieron en el pasado que nos ayudan a entender lo que pasa. Por ejemplo, conocemos por qué las personas abandonaron la tierra a partir de la prensa tirada en el suelo y los anuncios que todavía existen en la tierra. Otro ejemplo, la sucesión seguida de planos en los que vemos todos los retratos de los comandantes de la nave AXIOM nos informa del tiempo que ha pasado desde que las personas dejaron la tierra y cómo han cambiado (cada vez más gordos y menos despiertos).

Hay que tener en cuenta que Wall·E es una película hecha íntegramente por ordenador. El montaje no se hace de forma manual, como antes. Existen programas informáticos que han sustituido este trabajo. Además, en el caso de la técnica de animación, todo el proceso de la película (diseño de personajes, escenarios, efectos especiales…) se realizan por ordenador.