"Evitar los problemas que debes enfrentar es evitar la vida que tienes que vivir."
Paulo Coelho

domingo, 1 de agosto de 2010

Eres cobarde y además, molesto...

Te lo digo, me tienes harta. No haces nada por comprenderme, te limitas a llevarme la contraria constantemente. No me dejas ni darme un capricho, ni quieres que escuche la música que me apetece, insistes en hacerme reír cuando no quiero. Me obligas a levantarme cuando más ganas tengo de ahogarme en el mar de mis sábanas y mirar simplemente el techo en blanco, con la esperanza de dejar mi mente, del mismo color.


Siempre tienes mil razones y un discurso listo para demostrarme que me equivoco. Siempre hay un "pero" en todos mis audaces planes, siempre hay un "se podría hacer mejor" o un "espera la próxima oportunidad cuando esté todo más claro", "Prudencia, chica..". ¡Te detesto! No tienes ni la menos idea de lo que es la espontaneidad, te aburres hasta a ti mismo mientras decides qué es lo mejor que se puede hacer.

En toda aventura, ves siempre mil peligros. Sin duda, no eres nada divertido. El aquí y ahora, te estresa. Eso de tener que tomar decisiones a toda carrera y de forma precipitada, puede contigo... mejor dicho, no puedes con ello.

Y encima, no tienes nada de orgullo, no te marchas a pesar de que te ofendo, te pongo mala cara, no te alimento, te intento olvidar cada día y cometo una locura diaria para ver si finalmente te das por vencido conmigo.

En fin, me rindo ante lo evidente, a pesar de poco frecuente y realmente molesto, has decidido venirte a vivir conmigo, maldito seas, sentido común... (el menos común de los sentidos)